Transporte publico en Córdoba
El tren subterráneo
Con motivo de algunas discusiones y declaraciones públicas que se están planteando en nuestra ciudad sobre la instalación de un tren subterráneo en la zona central de la Capital, ya están promoviendo las consabidas controversias, en un marco político que no ayuda a ver claramente lo que conviene a la ciudadanía.
Que aspectos hay que tener en cuenta:
1) Un transporte subterráneo es un colector de viajes, pero de grandes volúmenes de pasajeros. Más de 500 mil pasajeros diarios, en una línea en ambos sentidos.
2) La demanda de energía eléctrica de las líneas centrales (de longitud hasta 10 km. cada una) es equivalente a la mitad de la demanda eléctrica de las zonas que atraviesa. Por lo que se conoce, en Córdoba, EPEC no estará en condiciones de garantizar esta demanda de 10 MW en esas zonas.
3) La cantidad de unidades guiadas, estimada durante un día hábil, puede absorber casi la tercera parte de la cantidad de pasajeros-unidades actuales. Hoy funcionan menos de 800 coches, que no llegan a transportar 600 mil pasajes diarios en todo Córdoba.
4) El subterráneo es una solución técnica necesaria para casos donde se hayan agotado todos los recursos por medio de las soluciones convencionales. Por lo que ha pasado en las últimas 3 o 4 intendencias, no se ha logrado resolver el problema de transportes ni en Capital ni en su zona vecina.
5) Si el costo estimado anunciado es de 1000 millones de dólares por sólo unos 20 km. de líneas, habríamos comprado un subterráneo de lujo. Aparece esta solución como antojadiza y cuesta carísimo ya que nos endeudaremos hasta el 2050.
Nuestra propuesta
Es oportuno considerar y aportar algunos conceptos sobre el tema, de modo que sirva para aclarar los aspectos a favor y los que se contraponen para tener más y mejores transportes públicos en Córdoba.
En primer lugar es necesario reconocer que nuestro sistema de transportes públicos ya no admite soluciones parciales o inversiones de corto alcance. Mucho menos propuestas faraónicas. Hay que reconocer que la ciudad no da para más en cuanto a las vías disponibles de comunicación, colapsadas por un aumento indiscriminado en los asentamientos urbanos y por la falta de generación de nuevas alternativas de comunicación entre los barrios o de estos con el área central. También, por si fuera poco, está sin resolver el dimensionamiento y la organización del sistema urbano de transportes colectivos, el que por su debilitada capacidad de funcionamiento causa una explosión incontrolada de viajes individuales por toda la planta urbana y además crea dificultades de locomoción con algunas localidades cercanas.
De tal modo, creemos que lo indispensable es definir, primero, el espacio que disponemos para poder desplazarnos más y mejor. Espacio sobra en Córdoba y es el que el ferrocarril ha dejado porque no funciona como antes. Han quedado muchos kilómetros sin uso (hay lugares despoblados, inseguros y marginales) desde casi el mismo Centro hasta los límites de la ciudad (Argüello, Est. Flores, Ferreyra, Malvinas Argentinas, Camino 60 Cuadras, Guiñazú, Camino a La Calera, etc.).
Los aproximadamente 100 km de vías ferroviarias se pueden aprovechar para ser nuevas vías de comunicación colectivas urbanas. Tienen la gran ventaja de tener la infraestructura ferroviaria, que resulta adaptable, mediante soluciones tecnológicas modernas de reducido costo. Algunas avenidas pueden ser adecuadas, en forma complementaria, para ofrecer mejores capacidades de tráfico.
En este espacio proponemos aprovechar estas líneas ferroviarias para un servicio de tranvías articulados o ferrocarril eléctrico “liviano” que aportan una solución integral de transporte, con sólidas ventajas como:
- Es menos ruidoso y menos contaminante que un ómnibus (por su menor consumo unitario por viajero).
- Consumen menos electricidad que el subterráneo, por la menor iluminación de estaciones y accesos.
- Ocupa un carril de calzada más angosto del que necesita un autobús, porque es un transporte guiado.
- No tiene desplazamientos laterales; racionaliza el uso del espacio público, aún en grandes avenidas.
- La construcción de su infraestructura es mucho más económica y lo hace más viable que el subterráneo.
- La accesibilidad es más sencilla porque no hay escaleras para llegar a los andenes, y además se puede disponer de tranvías de "piso bajo", lo que permite ahorrar tiempos en las paradas, aumentando la velocidad comercial.
Como variante moderna se propone también ventajosamente el ferrocarril eléctrico “liviano” tal como:
§ El tren liviano (Light Rail) es un moderno tranvía de transporte de pasajeros para escala metropolitana.
§ Este tipo de tren permite la conexión entre núcleos urbanos y/o zonas suburbanas, creando además nuevos potenciales de desarrollo urbano.
§ Una de sus características ventajosas es que los vehículos operan en un sistema que está parcial o totalmente segregado del tránsito vehicular, con carriles reservados, vías apartadas y mínima señalización propia.
§ Como un gran tranvía articulado: transporta más pasajeros (hasta 500 por formación).
En ambos casos estas infraestructuras pueden llegar a amortizarse a medio o largo plazo (hasta 30 años).
Por otra parte se destaca que el año 2006 fue para el tranvía en Argentina un año muy significativo, ya que se lanzó el proyecto del "Tranvía del Este" en Buenos Aires, el cual fue inaugurado oficialmente en julio de 2007 y librado al servicio público de inmediato, a lo largo del nuevo barrio Puerto Madero como un servicio comercial inicial.
Además de ello, hay otras iniciativas ya en la Argentina como en la Ciudad de Mendoza. Está avanzado en esa ciudad el proyecto denominado "Tranvía Urbano" de tipo regional.
Esto nos plantea en Córdoba lo que nos conviene elegir como solución equilibrada técnica, urbanística y económicamente. Por supuesto, con miras al largo plazo, más allá de toda especulación política. Se trata de poder abastecer a la comunidad, en los próximos años, a sus necesidades más diversas, entre ellas, la de desplazarse cómoda, fácil y económicamente en el área urbana, con el mayor alcance regional posible.
ING. ROMAN BALLESTEROS
Julio de 2008